Sergio César Arroyo Trejo Ingeniero civil y maestro en Administración de la construcción. Desde 1988 es catedrático de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura del IPN, en donde actualmente es el director.
Queremos fortalecer la formación de nuestro ingeniero civil para que sea sólida técnicamente e integral, que incluya la visión humanista y de respeto a la sustentabilidad en armonía con el ambiente. Teníamos bien definido establecer todos los aspectos de la educación 4.0 y la sustentabilidad de manera transversal en todo el plan de estudios, y también ofrecer una modalidad a distancia iniciando con algunas unidades de aprendizaje; la pandemia nos brindó la oportunidad de acelerar el proceso.
IC: ¿Cómo está funcionando la educación a distancia en la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (ESIA) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y cuáles han sido sus resultados en el contexto de la pandemia?
Sergio César Arroyo Trejo (SCAT): Bien. Nos ha costado mucho trabajo porque la pandemia nos sorprendió; sin embargo, a partir del mes de marzo establecimos contacto con los profesores para que pudieran dar clases a distancia. El Instituto Politécnico Nacional lleva tiempo impulsando la educación 4.0; se pretendía que esa transición fuera un poco más pausada para ir ajustando lo necesario y así establecer los mejores procedimientos, con profesores y alumnos, para que todos estemos mejor preparados en el uso de las mejores tecnologías, pero esta circunstancia nos obligó a acelerar el proceso de dar las clases a distancia.
Hoy casi todos los maestros están impartiendo sus clases, y digo la mayor parte porque hablo del 98% de los profesores; el 2% no tardará en incorporarse, ya que están poniéndose al día con esta forma de enseñar. Tenemos una plantilla de 400 profesores, entonces quiere decir que ocho o nueve son los que todavía están por incorporarse, pero estamos funcionando bien.
Tenemos muchas experiencias muy interesantes de cómo fuimos evolucionando en el proceso de las clases a distancia, experiencias que han significado un aprendizaje para profesores y alumnos en esta modalidad impuesta por las políticas oficiales para enfrentar la pandemia en México y en la mayoría de los países.
IC: Una observación que se hace en estos casos es que se ha dificultado la realización de pruebas y exámenes, así como la correcta participación activa de los alumnos respetando horarios y permanencia durante la clase con audio y video. ¿En la ESIA existe algún tipo de normatividad que se haya establecido para que resulte más efectiva la clase y la evaluación?
SCAT: Sí. Hemos considerado utilizar diferentes plataformas (Moodle, Meet, Teams, Zoom). Hemos trabajado para que maestros y alumnos se informen adecuadamente en el uso de cada una de ellas; hace poco terminó un curso sobre el uso de la plataforma Teams, que nos permite mayor productividad y colaboración, y espacios de trabajo personalizables. Queremos que, cuando sea necesario, los alumnos enciendan la cámara y estén puntualmente en la clase –los exámenes no son la excepción–; también tenemos varias aplicaciones donde el alumno hace su examen y el maestro determina o detecta si hay alguna irregularidad. Algo fundamental, paralelamente a los controles, es generar confianza en nuestros alumnos; queremos que confíen en los profesores y los profesores en ellos, para que se actúe con honestidad, responsabilidad y ética.
IC: Los usuarios no siempre están capacitados en recursos tecnológicos; en el caso de los alumnos y de los profesores, ¿ustedes han podido evaluar si la mayoría de ellos cuentan con todas las condiciones materiales y de capacitación para poder participar de las clases en línea?
SCAT: Hay 6,800 alumnos y 400 profesores en la ESIA Zacatenco,y hemos procurado que estén todos en condiciones de participar. Ciertamente, algunos profesores de mayor edad no están tan preparados para el manejo de las tecnologías, pero han hecho un gran esfuerzo para poder dar sus clases en línea, y considero que eso es muy significativo para todos.
IC: ¿Cuándo estiman ustedes que se darán las condiciones para retomar las clases presenciales, aunque sea con medidas especiales?
SCAT: El IPN inició su periodo escolar el 28 de septiembre, pero ahora no hay condiciones adecuadas para regresar, ya que nos encontramos en semáforo rojo. El director general del IPN planteó que lo más importante es proteger a nuestra comunidad, y que no se regresaría a clases hasta que estuviera el semáforo en verde, según el protocolo de las autoridades de salud.
El actual periodo escolar termina el 2 de febrero de 2021, y lo vamos a realizar en línea. Probablemente el nuevo semestre o periodo escolar, de darse las condiciones, volvería a ser presencial o semipresencial.
IC: En este contexto, sin duda muy particularmente en el caso de la ingeniería civil, aunque no es excluyente, las prácticas de laboratorio son necesarias en la enseñanza y debieron suspenderse. ¿Cómo se recuperarán para evitar afectar la formación de los estudiantes?, y si se están realizando, ¿en qué condiciones se llevan a cabo?
SCAT: Establecimos un programa de realización de prácticas virtuales y de filmación de éstas utilizando diferentes herramientas. De hecho, en este semestre ya llevamos algunas prácticas virtuales; tenemos un cronograma de actividades en las que los profesores filmarán las prácticas demostrativas.
Considero que vamos a lograr un buen porcentaje, y seguramente más adelante tendremos todas las prácticas de manera virtual.
También tenemos en nuestro plan de estudios unidades de aprendizaje de ingeniería aplicada en las que se desarrolla un proyecto durante el semestre; la ventaja es que en realidad ya muchos proyectos se llevan a cabo con la utilización del software actual, y entonces se puede manejar más a distancia –por supuesto, con la experiencia y las indicaciones del profesor.
IC: ¿Se plantean que con las clases presenciales se recuperen también esas prácticas de laboratorio que se hicieron ahora de manera virtual o no se hicieron?
SCAT: Sí está considerado. En el semestre anterior que terminó el 31 de julio, y del 26 de agosto al 18 de septiembre, tuvimos un curso de recuperación de la mayoría de las unidades de aprendizaje con el objetivo de que los alumnos interesados en fortalecer sus conocimientos lo pudieran hacer, y también para cursar la materia y aprobarla si fuera el caso.
IC: ¿Qué impacto tuvo la pandemia en su proyecto como director de la ESIA?
SCAT: Yo era subdirector académico cuando surgió la pandemia. Tomé el cargo como director a partir del 28 de agosto de este año, pero aun como subdirector fue un impacto muy importante; teníamos que actuar de manera inmediata y tomar medidas para cumplir con todo el semestre. Se dictó una serie de medidas a las que toda la comunidad de la ESIA Zacatenco respondió muy bien, con el apoyo y los lineamientos que se establecieron desde la Dirección General. Ahora, como director de la escuela, y con la experiencia y los aprendizajes obtenidos, debemos planear mejor el desarrollo del ciclo escolar.
IC: La pandemia es un momento de crisis y, como suele decirse, toda crisis es también una oportunidad. ¿Se está contemplando que cuando haya pasado la pandemia alguna de las experiencias en el manejo de programas y softwares para las clases y actividades a distancia se incorporen de manera permanente?
SCAT: Precisamente estamos en el proceso de rediseño del plan de estudios. Teníamos muy bien definido establecer todos los aspectos de la educación 4.0 y la sustentabilidad de manera transversal en todo el plan de estudios, y también ofrecer una modalidad a distancia iniciando con algunas unidades de aprendizaje; sin embargo, la pandemia nos brindó la oportunidad y de alguna forma nos obligó a acelerar el proceso de prepararnos mejor para el trabajo tanto presencial como semipresencial y a distancia.
IC: Hacía referencia a la revisión del plan de estudios. ¿Ya se culminó?, ¿cuál es el estatus?, ¿ha habido cambios profundos?
SCAT: Hasta el momento ya tenemos el mapa curricular terminado. Estamos trabajando en los programas de las diferentes unidades de aprendizaje de los primeros semestres y aún falta la autorización del Consejo Técnico Consultivo Escolar y del Consejo General Consultivo; no obstante, con el trabajo que ha desarrollado la Comisión de Planes y Programas de estudios de la escuela ya vamos muy adelantados, y la intención es fortalecer la formación de los estudiantes para que como ingenieros civiles sean competitivos en el ámbito productivo. Son dos aspectos importantes: por un lado, la formación del ingeniero civil, y por otro, la educación 4.0 (el internet
de las cosas, big data, clases a distancia, realidad virtual) y la sustentabilidad que ha estado impulsando el director general del IPN.
IC: La ingeniería civil tiene una implicación importante en el desarrollo de nuestro país, no solamente en la construcción de obras de infraestructura sino también desde el punto de vista económico, social y político, donde importa la planeación, por ejemplo. ¿Este enfoque se consideró en la actualización del plan de estudios?
SCAT: Existe ese enfoque en el plan vigente; sin embargo, queremos fortalecer la formación integral de nuestros ingenieros civiles para que sea sólida técnicamente y también incluya la visión humanista y de respeto a la sustentabilidad en armonía con el ambiente.
IC: Además de las materias específicas de la ingeniería, en el marco de la consigna politécnica de “La técnica al servicio de la patria”, ¿cuáles son las principales habilidades complementarias en las que se debe formar a un estudiante de ingeniería que le permitan enfrentar con mayor potencial una opción laboral y servir a la sociedad?
SCAT: “La técnica al servicio de la patria” es el lema del Instituto Politécnico Nacional y la consigna más conocida. Sin embargo, en el decálogo del estudiante del IPN hay algunas en el mismo sentido: “Soy politécnico porque exijo mis deberes antes que mis derechos”, “Por convicción y no por circunstancia”, “Para alcanzar las conquistas universales y ofrecerlas a mi pueblo”, por ejemplo. Buscamos que nuestros alumnos tengan un aprendizaje autónomo, que sean flexibles, cultiven determinadas actitudes y aptitudes como el valorar el trabajo en equipo y una buena comunicación; que sean líderes, tolerantes, y que tengan siempre presente el compromiso social, que en la ingeniería civil es mucho más evidente que en otras profesiones.
IC: ¿Cuál es la evaluación que hacen respecto del nivel con que egresan los estudiantes de la ESIA?, ¿se tiene información sobre la salida laboral que logran?, ¿la ESIA trabaja para esto, y en su caso, cómo y con cuáles resultados?
SCAT: Contamos con información, pero debemos sistematizarla y profundizar más en este aspecto. La ESIA es la escuela más grande de ingeniería civil de México, con una matrícula hoy de 6,800 alumnos, y tenemos entre 600 y 700 egresados semestralmente.
IC: ¿Existe una vinculación con el sector público y empresarial para abrir puertas a los estudiantes?
SCAT: Sí. Es un buen momento de oportunidad para que en el nuevo plan vinculemos más a nuestros alumnos con el sector productivo mediante prácticas profesionales.
IC: Además de los recién egresados están los veteranos, quienes ya tienen una carrera profesional en el sector público y empresarial. ¿Cuál es la relación de la ESIA con ellos?
SCAT: La relación es muy buena. Existe un patronato de egresados con el que tenemos una relación excelente. Ellos y las asociaciones han apoyado mucho a la escuela, pero podemos lograr mucho más. El objetivo es que nuestra escuela siga mejorando en todos los sentidos. Pienso que se ha logrado y se seguirá logrando, porque hay una identidad de los egresados con su escuela, es decir, con su alma máter.
IC: ¿Sugiere la dirección de la ESIA que un estudiante inicie su posgrado inmediatamente después de concluir la carrera, o consideran conveniente dejar pasar un tiempo antes de iniciarlo para participar de la práctica profesional?
SCAT: La ESIA cuenta con la sección de estudios de posgrado e investigación. Algunos egresados quieren tomar el posgrado de inmediato, al terminar la carrera; otros jóvenes se integran al ámbito productivo y regresan a los dos, tres, cuatro o cinco años queriendo estudiar un posgrado; ambas opciones son válidas y la elección depende de los intereses de cada uno y de su desarrollo profesional. Considero que ambas opciones son buenas.
IC: Desde que se fundó la ESIA, ¿cuáles han sido los cambios más relevantes en los planes de estudio, particularmente en los tiempos recientes?
SCAT: Ha habido cambios muy interesantes, como la flexibilidad y formación integral de nuestros estudiantes. Las condiciones van cambiando con el tiempo; antes egresaba el alumno y buscaba su titulación: siendo pasantes de ingeniería se iban al ámbito productivo, regresaban y se titulaban por alguna modalidad, ya fuera experiencia profesional, tesis o seminario; ahora tenemos la Línea Curricular de Titulación. El alumno tiene la oportunidad de llevar esta línea a partir del noveno semestre, y, si aprueba con 8 su proyecto terminal, puede titularse; por supuesto, debe cubrir los requisitos de servicio social y nivel de inglés solicitado.
Algo fundamental que se ha promovido es la flexibilidad, que le permite al alumno tener una carga mínima y una carga máxima; la carga máxima le permite terminar la carrera en cuatro años, si quiere adelantar unidades de aprendizaje. Cinco años es el tiempo normal que tiene establecida la escuela, y hasta 15 semestres si se llegara a retrasar o llevara la carga mínima. Ésos son esencialmente los cambios que se han vivido en los últimos tiempos. Quiero destacar algo fundamental: la ingeniería aplicada es la fortaleza de nuestra escuela; ésta les ha permitido a nuestros egresados tener un buen desempeño en el ámbito profesional. En todas las épocas nuestros egresados siempre se han destacado en el ámbito profesional.
IC: Mencionó que hay 6,800 alumnos y que es la escuela que tiene más alumnos de ingeniería civil. ¿Cómo ha evolucionado esa matrícula y por cuáles motivos, según su perspectiva?
SCAT: En el año 2004, la matrícula era de 3,200 alumnos. Una vez que se estableció este plan –aún vigente–, se realizó una proyección en la que se determinó que en el año 2015 llegaríamos a 5,000 alumnos, y de 2015 a 2020 llegó a 6,800. Esta evolución se dio porque algunos cuellos de botella que se presentaban en el segundo, tercer y séptimo semestre, determinados por el alto índice de reprobación en algunas unidades de aprendizaje, se resolvieron cambiando la ubicación de la unidad de aprendizaje y con el incremento del décimo semestre. Gracias a ello, la recuperación de la matrícula fue muy importante, destaco que el 30% de los 6,800 estudiantes son mujeres, y su desempeño académico en las aulas y en la vida profesional es excelente.
IC: Planteó que están tratando de fortalecer la gestión en materia de investigación, de estudios, de proyectos y salida laboral de los egresados. ¿Qué vínculos formales tiene la ESIA con el sector empresarial, con el sector público y con otras instituciones académicas nacionales e internacionales donde pudieran abonar en preparación práctica y teórica, además de salida laboral, para los egresados?
SCAT: Contamos con un Programa de Movilidad Académica. El IPN tiene convenios con universidades en todo el mundo. Los alumnos con un buen promedio tienen oportunidad de irse por lo menos un semestre a diferentes universidades nacionales o extranjeras. Es un programa relevante porque fortaleció la preparación de nuestros estudiantes. Contamos también con proyectos de servicio externo, proyectos de investigación para el sector público y empresarial que también fortalecen la preparación de nuestros alumnos, además de que queremos fortalecer las prácticas profesionales con el ámbito productivo.
IC: ¿Qué impacto representan las nuevas tecnologías en el plan de estudios de la carrera de ingeniería civil de la ESIA? Muy experimentados ingenieros civiles opinan que las nuevas generaciones de estudiantes de ingeniería, incluso egresados, tienden a confiarse demasiado de los programas, y ello hace perder la capacidad de análisis para dejarla en poder de un programa o de una aplicación, y, por un mínimo error humano o de la propia aplicación, puede haber resultados erróneos que en ciertos casos pueden generar graves consecuencias.
SCAT: Yo pienso que las diferentes aplicaciones, programas o softwares son herramientas, y que el ingeniero debe ser lo suficientemente analítico para elegir el más apropiado y determinar si los resultados que le está brindando su utilización son los más adecuados.
IC: ¿Este concepto se inculca en los alumnos?
SCAT: Efectivamente. Los profesores tienen la responsabilidad de remarcarlo, así como de crear conciencia en los alumnos de que un software o cualquier otra aplicación es solamente una herramienta cuyo uso y resulta-
dos deben ser estudiados y verificados analíticamente, y que debe estar en el marco normativo o los espectros de diseño, según sea el caso.
IC: ¿Cuál es la participación de la ESIA en los proyectos y obras de infraestructura, tanto en relación con el sector público como con el empresarial y particularmente en los proyectos que acaba de presentar el gobierno federal y organizaciones empresariales?
SCAT: La participación de nuestros egresados en todos esos proyectos de infraestructura es muy importante, y la ESIA se esfuerza por mantener y aumentar dicha participación.
IC: ¿Algún comentario final?
SCAT: Sí, quiero resaltar que somos orgullosamente politécnicos y que siempre estará presente la consigna de la técnica al servicio de la patria. Agradezco al Colegio de Ingenieros Civiles de México la oportunidad de compartir con los lectores el funcionamiento de la ESIA en las condiciones actuales y los procesos en marcha.