14 julio, 2025 3:26 am

Jorge Sánchez-Sesma. Investigador independiente

El agua de mar se expande lentamente en la medida en que el calentamiento avanza a través de las profundidades del océano; por otro lado, la lenta circulación oceánica transmite calor que se distribuye a las masas continentales a través de los grandes “giros” atmosféricos. Lo más importante es que estas respuestas retrasadas del clima tienen profundas implicaciones no sólo en el clima futuro, sino también en el clima presente.

 

En estudios recientes (IPCC, 2013; Meehl et al., 2005) se ha argumentado que “la inercia térmica de los océanos y las respuestas lentas de otros efectos indirectos implican que el clima puede tardar siglos o más para modificarse ante los cambios en el forzamiento radiativo”. Esos estudios también indican que incluso si los gases de efecto invernadero se estabilizaran en niveles del año 2000 ocurriría un calentamiento adicional de aproximadamente 0.5 °C. Sin embargo, esta argumentación válida de la respuesta retrasada del clima no es completa, pues sólo considera los retrasos futuros causados por los efectos radiativos recientes del CO2, pero deja de lado las influencias y los cambios que el clima actual presenta y que han sido generados por procesos radiativos (la energía solar y la actividad volcánica) ocurridos varios siglos antes.

Para analizar mejor esto, a continuación se comentan y discuten los mecanismos de la respuesta retrasada del océano y sus implicaciones más importantes en el clima.

 

Mecanismos

Uno de los mecanismos de la respuesta retrasada del océano sucede cuando el calentamiento global se difunde lentamente desde la capa del océano hasta varios kilómetros por debajo de la superficie. Los procesos de convección y difusión en pequeña escala por los cuales el calor penetra hacia abajo a través del océano son muy lentos.

Otro mecanismo está relacionado con el hecho de que los océanos no son simplemente depósitos pasivos para la absorción del calentamiento de la superficie. Son altamente dinámicos y tienen un papel clave, por ejemplo, en el transporte de calor de las latitudes bajas a las latitudes más altas para ayudar a aliviar el desequilibrio en el calentamiento por la acción solar. Aunque gran parte de este transporte se realiza a través de los giros oceánicos horizontales, el factor más importante es la circulación termohalina (THC, por sus siglas en inglés) del océano, como se esquematiza en la figura 1.

05-figura1Figura 1. Circulación termohalina formada por lazos de flujo en superficie
(rojos) y en profundidad (azules) que tardan hasta 2 mil años en realizar
un ciclo completo.

Debe mencionarse que la THC desempeña un papel significativo en la variabilidad natural en diferentes plazos del sistema climático. Por ejemplo, hay un modo de variabilidad climática conocida como “oscilación multidecadal del Atlántico” que, según modelos y mediciones, está ligada a la componente de la THC en el Atlántico norte y que por sí sola explica buena parte del calentamiento reciente.

 

Incidencia en el clima

Los dos mecanismos oceánicos que generan respuestas retardadas tienen amplias repercusiones tanto en el aumento del nivel del mar como en los cambios globales de temperatura. Esto debido a que, por un lado, el agua de mar se expande lentamente en la medida en que el calentamiento avanza a través de las profundidades del océano, y por el otro lado, a que la lenta circulación oceánica transmite calor que se distribuye a las masas continentales a través de los grandes “giros” atmosféricos.

Lo más importante es que estas respuestas retrasadas del clima tienen profundas implicaciones no sólo en el clima futuro, sino también en el clima presente.

 

Nota final

Con base en un análisis reciente que considera las herencias oceánicas del pasado, reconstruidas para los últimos milenios, el autor ha detectado retrasos incluso mayores de 500 y 1,000 años en las respuestas de la temperatura hemisférica y del nivel del mar, respectivamente. Esto permite explicar en buena medida los calentamientos recientes y el aumento del nivel del mar como una respuesta retrasada a los procesos solares y volcánicos ocurridos hace varios siglos.

 

Referencias
Intergovernmental Panel on Climate Change, IPCC (2013). Climate change 2013. The physical science basis.
Meehl, G. A., W. M. Washington, W. D. Collins, J. M. Arblaster, A. Hu, L. E. Buja, W. G. Strand y H. Teng (2005). How much more global warming and sea level rise? Science 307 (5,716): 1,769-1,772.

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