En México, el compactador giratorio se ha usado por más de una década para el diseño de mezclas asfálticas y en la actualidad existe una gran experiencia en su aplicación tanto en el diseño de laboratorio como en el control de la producción.
La compactación en mezclas asfálticas es el proceso mediante el cual los agregados cubiertos con cemento asfáltico se entrelazan mediante presión y acción de amasado con o sin vibración mientras se reduce el aire atrapado en el concreto asfáltico. En consecuencia, la estructura interna de la mezcla evoluciona durante el proceso de compactación. Es sabido que la estructura interna del concreto asfáltico desempeña un papel muy significativo en las propiedades mecánicas y en la resistencia a los principales tipos de deterioros a los cuales está expuesto en servicio.
Por este motivo, desde sus inicios en la década de 1990, el compactador giratorio fue concebido para fabricar en laboratorio especímenes con las densidades obtenidas bajo las condiciones de carga de los pavimentos en servicio, buscando simular dos características principales: a) la estructura interna y b) la cantidad, tamaño y distribución de los vacíos de aire, debido a que el principal objetivo del diseño de una mezcla asfáltica es encontrar las proporciones volumétricas de agregado, cementos asfálticos y vacíos de aire, tomando en cuenta aspectos técnicos y económicos.
Elaborado por Noé Hernández Fernández, del Instituto de Ingeniería de la UNAM. Puedes leer el artículo completo en la revista Geotecnia 245, disponible en el sitio web de la SMIG o en el siguiente enlace: Geo 245