Por medio de alianzas estratégicas, el Consejo Mundial del Agua ha impulsado la generación y difusión del conocimiento en materia hídrica. México se ha unido a este esfuerzo a través de la publicación de un libro en el que se documenta la manera en que el sector puede proporcionar soluciones valiosas para los desafíos planteados por la variabilidad y el cambio climático a través de la infraestructura hídrica sólida y la gestión adaptativa del agua.
Fundado en 1996, el Consejo Mundial del Agua (WWC, por sus siglas en inglés) es un líder influyente que trabaja para posicionar el agua en la cima de la agenda política global, y cuyo principal enfoque es la dimensión política de la seguridad hídrica, la adaptación y la sostenibilidad.
Con la misión de movilizar la acción en todos los niveles, el WWC tiene tres objetivos fundamentales: perfilar las agendas y asistir para movilizar la acción política; reunir influencias clave y tomadores de decisiones para debatir temas esenciales del agua, y retar el pensamiento convencional a través de comunicaciones, reuniones y publicaciones.
Una herramienta de impacto del WWC para la consecución de tales objetivos es su programa editorial, en virtud de las destacadas alianzas que establece para sus publicaciones y de la amplia experiencia del consejo en temas como abastecimiento de agua y saneamiento, agricultura, calidad del agua y contaminación, cambio climático, crecimiento y economía verde, cooperación transfronteriza, derecho al agua, desarrollo de capacidades, desarrollo sostenible, energía, financiamiento, gestión de riesgos y desastres, gestión integrada de los recursos hídricos, gobernanza, huella hídrica y agua virtual, infraestructura, investigación y ciencia, innovación y tecnología, tratamiento de agua residual y reúso, urbanización, medio ambiente y biodiversidad, monitoreo y recolección de datos.
Como ejemplo de las alianzas estratégicas que han dado impulso a la generación y difusión del conocimiento en materia de agua, también objeto del programa editorial del WWC, se pueden citar Agua y desastres, publicación conjunta de este organismo y la Junta Asesora de la Secretaría de Naciones Unidas sobre Agua y Saneamiento; Perspectivas sobre el agua y la adaptación al cambio climático, publicación serial del WWC, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y la Asociación Internacional del Agua; Agua y crecimiento verde, publicación conjunta del WWC y el gobierno de la República de Corea, a través del Ministerio de Territorio, Transporte e Infraestructura, la cual presenta una investigación dirigida durante cuatro años, un enfoque teórico nuevo, un marco analítico y recomendaciones para formuladores de políticas, con el fin de comenzar procesos de implementación de estrategias sobre agua y crecimiento verde, remarcando la importancia de un enfoque de gestión que contribuya al crecimiento económico, la protección ambiental y el desarrollo socialmente incluyente; Agua: ¿en condiciones para financiamiento?, publicada por el WWC y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, que se enfoca en catalizar el crecimiento nacional a través de la inversión en la seguridad hídrica; Hacia un futuro seguro en agua y alimentos, una perspectiva crítica para hacedores de políticas, editada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura con el propósito de aportar una visión global de los aspectos técnicos y económicos del uso del agua en la agricultura, con particular énfasis en el cultivo y la ganadería, y dirigida particularmente a los diseñadores de políticas.
México, a través de la Conagua y la Asociación Nacional de Empresas de Agua y Saneamiento de México (ANEAS), se ha sumado a estos esfuerzos y en 2014 emprendió con el WWC un programa intitulado Incremento de la resiliencia a la variabilidad y cambio climático. Los papeles de la infraestructura y la gobernanza en el contexto de la adaptación, producto a partir del cual se publicó exitosamente un libro científico con el mismo título.
La infraestructura por sí sola no es suficiente para aumentar la resiliencia, ya que ésta debe estar acompañada por enfoques de gestión y gobernanza apropiados y alineados a los contextos locales para ser eficaz. La planificación y gestión de estos enfoques deberá efectuarse en un marco de gobernanza que tenga en cuenta las perspectivas a largo plazo y las necesidades de los actores multisectoriales y multinivel.
Esfuerzos importantes en materia de adaptación, alcanzados en proyectos, cuencas y regiones de todo el mundo, están documentados en este libro a lo largo de 11 estudios de caso, en los cuales se analiza cómo el sector hídrico puede proporcionar soluciones valiosas para los desafíos planteados por la variabilidad y el cambio climático a través de la infraestructura hídrica sólida y la gestión adaptativa del agua.
Entre los mensajes clave que emergen de estos estudios destacan que existe la necesidad de cerrar la brecha del conocimiento científico en este campo en particular, ya que la evidencia de los estudios demuestra que la infraestructura puede contribuir de manera significativa a la creación de resiliencia al cambio climático. Sin embargo, la infraestructura por sí sola no es suficiente para aumentar la resiliencia, ya que ésta debe estar acompañada por enfoques de gestión y gobernanza apropiados y alineados a los contextos locales para ser eficaz. La planificación y gestión de estos enfoques deberá efectuarse en un marco de gobernanza que tenga en cuenta las perspectivas a largo plazo y las necesidades de los actores multisectoriales y multinivel.
La resiliencia ante los desastres causados por inundaciones requerirá una infraestructura que se mantenga adecuadamente mediante la gestión armónica, una capacidad de prevención de crisis, así como acciones coordinadas y un enfoque pragmático de las incertidumbres a futuro, como el cambio climático. Por último, será necesario mejorar la gobernanza para instaurar cambios fundamentales y ayuda para la recuperación después de los desastres.
Los estudios demuestran que la infraestructura hídrica debe tener un uso multipropósito para satisfacer las crecientes demandas de agua para el uso agrícola, industrial, energético y doméstico. Sin embargo, la infraestructura hídrica de uso multipropósito plantea problemas específicos de financiamiento, además de los genéricos, al agua. Las cifras involucradas son típicamente grandes, algunos componentes no son financieramente rentables en estrictas condiciones de mercado, gran parte de los diferentes actores se ven afectados, existen muchos usuarios en competencia y a menudo surgen entre ellos conflictos sobre las prioridades.
La infraestructura hídrica debe tener un uso multipropósito para satisfacer las crecientes demandas de agua para el uso agrícola, industrial, energético y doméstico. Sin embargo, este tipo de infraestructura plantea problemas específicos de financiamiento, además de los genéricos al agua. Las cifras involucradas son típicamente grandes, algunos componentes no son financieramente rentables en estrictas condiciones de mercado, etcétera.
Del mismo modo, destaca que durante mucho tiempo el agua ha sido un sector ignorado y marginado en las discusiones de las políticas públicas para el crecimiento y el desarrollo sostenible, y esta falta de atención se hace más visible y peligrosa en forma de una insuficiencia de la infraestructura hídrica que permita mayor resiliencia ante el cambio climático. Estos son sólo algunos de los hallazgos del libro.
Gran parte de este acervo está disponible en el sitio web del WWC: www.worldwatercouncil.org
Elaborado por la ANEAS de México con información proporcionada por el WWC.