Víctor Manuel Ortiz Martínez, Judith G. Ramos, Jesús Gracia Sánchez, Édgar Héctor Guzmán. Instituto de Ingeniería, UNAM.
En este documento se considera la mitigación de la contaminación in situ en escala de localidad para cuatro comunidades dentro de la cuenca del río Atoyac. En primer lugar, se analizó la mejora o cambio del sistema de red de alcantarillado y luego se implementó un sistema de sanitización hidráulica (recogida, transporte, tratamiento y utilización final en riego). Se propusieron dos tuberías de alcantarillado en función de la densidad y espacio de la urbanización y para evitar conflictos y priorizar acciones adicionales para la restauración del río.
A pesar de los esfuerzos para recuperar la calidad de los ríos y otros cuerpos de agua, la situación actual es que el saneamiento y la gestión de las aguas residuales son cuestiones que no se abordan por completo debido a la falta de priorización política, que puede traducirse en falta de gobernabilidad e inadecuados operación y mantenimiento. Adicionalmente, las prácticas culturales existentes en muchos lugares llevan a la eliminación de desechos líquidos y sólidos directamente en las corrientes de agua. Se ha estimado que entre 80 y 90% del agua utilizada en asentamientos urbano-rurales es descargada al medio ambiente sin tratamiento. Así, aunque haya continuas iniciativas para lograr la restauración de una corriente, que en términos burdos implica el restablecimiento de la condición natural antes de que fuera perturbada, la posición de la sociedad y las autoridades podrían detenerlo.
El término restaurar involucra el “mejorar los procesos hidrológicos, geomórficos y ecológicos en un sistema degradado de cuencas hidrográficas y reemplazar elementos perdidos, dañados o comprometidos del sistema natural” (Kauffman, 1997; Palmer, 2005; Roni et al., 2002; Wohl et al., 2005). Murdock (2008) señala que un gran número de proyectos consideran la mitigación de la influencia humana negativa; sin embargo, éstos no abordan la salud ecológica de todo el sistema. En este sentido, Palmer et al. (2010) afirman que para tener un proyecto de restauración exitosa, los interesados y los usuarios del sistema ecológico deben ser involucrados. Sin embargo, en muchos casos esta práctica no se logra, la calidad del agua del río está altamente comprometida y su tratamiento resulta complicado debido a los diferentes tipos de contaminantes (urbano, agrícola, industrial). Por lo tanto, la mejor opción es tratar las aguas residuales in situ, tanto en fuentes municipales como industriales.
Con tal idea, este documento presenta una opción para mitigar la contaminación en el río Atenco, resultado de la descarga de aguas residuales no tratadas directamente en él, tratándolas en las localidades de donde provienen. En el estudio se consideraron cuatro comunidades con más de 1,000 pero menos de 10,000 habitantes; asimismo, se observó que es necesario incluir un punto de vista político para evitar conflictos entre las partes interesadas.
Puedes leer el artículo completo en la revista Ingeniería Civil 577, disponible en el sitio web del CICM o en el siguiente enlace: IC 577