Jomaelah Morales Rayo Ingeniero civil y maestro en Ingeniería.
José Manuel Rodríguez Varela Ingeniero civil y maestro en Ingeniería hidráulica.
Oscar Jesús Llaguno Guilberto Ingeniero civil y maestro en Ingeniería hidráulica.
En México se han realizado atlas de riesgos, ya sea por estado o municipio, para determinar la vulnerabilidad de la población ante eventos extremos: sismos, erupciones volcánicas, tsunamis e inundaciones, entre otros; este último fenómeno es el de interés en este artículo. Mediante un enlace entre los mapas de vulnerabilidad y los mapas de peligro, se pueden tener como resultado los mapas de riesgo por inundaciones.
La vulnerabilidad es un factor de riesgo de un elemento o grupo de elementos expuestos a una amenaza. Se refiere a la predisposición o susceptibilidad física, económica, política o social que tiene una comunidad de ser afectada o de sufrir efectos adversos en caso de que se manifieste un fenómeno peligroso de origen natural, socionatural o antropogénico. Las diferencias de vulnerabilidad del contexto social y material expuesto ante un fenómeno peligroso determinan el carácter selectivo de la severidad de sus efectos (Cenapred, 2022).
En México se han realizado atlas de riesgos, ya sea por estado o municipio, para determinar la vulnerabilidad de la población ante eventos extremos: sismos, erupciones volcánicas, tsunamis e inundaciones, entre otros; este último fenómeno es el de interés en este artículo. Mediante un enlace entre los mapas de vulnerabilidad y los mapas de peligro, se pueden tener como resultado los mapas de riesgo por inundaciones.
A diferencia del peligro, que está definido por los patrones climáticos (la naturaleza) y por ello es difícil modificarlo, la vulnerabilidad es una variable que el ser humano tiene la posibilidad de disminuir o mitigar (Cenapred, 2021a).
Respecto a las inundaciones, en escala mundial, de acuerdo al Centre for Research on the Epidemiology of Disasters (CRED), entre 1998 y 2017 los desastres climáticos y geofísicos cobraron la vida de 1.3 millones de personas y dejaron un saldo de 4,400 millones de personas heridas, desplazadas, sin hogar o necesitadas de asistencia urgente. Las inundaciones, las tormentas, las sequías, las olas de calor y otros eventos meteorológicos extremos representaron el 91% de todos los desastres ocurridos. Dentro de esta cifra, las inundaciones fueron el tipo más frecuente de desastres, pues equivalieron al 43% de todos los eventos registrados (CRED, 2019).
Las inundaciones son uno de los fenómenos naturales más comunes en nuestro país; prácticamente todos los años se producen por el desbordamiento de los ríos debido al exceso de lluvia, y pueden causar daños severos. Los efectos negativos de las inundaciones se deben en gran medida a la actividad humana: la deforestación y la ubicación de las viviendas en zonas bajas cercanas a los ríos y costas (Cenapred, 2019).
Como parte de las medidas preventivas que deben generarse ante la ocurrencia de este fenómeno, en este artículo se presentan los mapas de vulnerabilidad de la ciudad de Cuernavaca ante los efectos de las inundaciones. El objetivo es generar mapas de vulnerabilidad que consideren a la población, sus características económicas y las viviendas de la ciudad de Cuernavaca con base en la información contenida en el Área Geoestadística Básica (AGEB) generada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía según el Censo de Población y Vivienda 2020. La metodología considerada se basa en el Estudio de Riesgo de Inundaciones en Zonas Urbanas de la República Mexicana (IMTA, 2015).
Definición de inundación
Entre los fenómenos perturbadores que causan desastres y daños directos e indirectos a una zona urbana o rural se encuentran las inundaciones. Éstas se clasifican en pluviales, fluviales, costeras y las relacionadas con la falla de infraestructura hidráulica.
Las inundaciones se encuentran en la categoría de fenómenos hidrometeorológicos, y se refieren a la presencia de agua donde habitualmente no la hay, como consecuencia de marea de tormenta o falla de una estructura hidráulica; por la caída de lluvia intensa durante muchas horas o días; por el taponamiento de las coladeras resultado de tirar basura en las calles; por la obstrucción del cauce natural del agua en barrancas o ríos y su consecuente desbordamiento debido a la acción de tirar cascajo o basura en esos cuerpos naturales. Salvo las inundaciones intempestivas que pueden presentarse en los ríos o en zonas aledañas a las presas o canales de aguas residuales, en algunos casos es posible tomar medidas suficientes para evitar o aminorar los daños que causan a la población (Cenapred, 2021b).
Como parte de las medidas para atenuar y prever los daños directos, se desarrollan mapas de vulnerabilidad por inundación; tienen el fin de cuantificar el daño potencial que se genera en un grupo de personas de acuerdo con su edad, características económicas y tipo de vivienda, y ello permite conocer la resiliencia de una localidad o ciudad ante un fenómeno hidrometeorológico específico, en este caso las inundaciones.
Riesgo ante inundaciones
El riesgo en general está dado por la siguiente expresión (Cenapred, 2021c):
R = CVP
donde:
C = valor de los bienes expuestos
V = vulnerabilidad o porcentaje de daños de una vivienda, debidos a la inundación
P = peligro o probabilidad de que ocurra un determinado evento.
Dado que la vulnerabilidad y el peligro son variables adimensionales, las unidades del riesgo serán las mismas que las del valor de los bienes expuestos, que generalmente están dadas en unidades monetarias. El peligro y el riesgo no serán vistos en este artículo; sin embargo, para la generación de mapas de riesgo por inundaciones, la vulnerabilidad forma parte del primer análisis a realizarse y su importancia radica en que es una variable que puede ser modificada para beneficio de la población ante un evento perturbador.
Generación de mapas de vulnerabilidad
Los insumos requeridos para la generación de los mapas de vulnerabilidad por inundación corresponden al análisis de los principales resultados por AGEB, manzana urbana 2020, y el archivo vectorial de las manzanas obtenido del Marco Geoestadístico de Censo de Población y Vivienda 2020; ambos archivos disponen de un identificador CVEGEO (clave Geoestadística) para su vinculación en un sistema de información geográfica (SIG).
Para la determinación de la vulnerabilidad ante inundaciones en la ciudad de Cuernavaca, se consideró el análisis de la población, características económicas y vivienda, de acuerdo con la metodología mencionada a continuación.
Para la obtención del mapa de vulnerabilidad por población, se debe calcular el índice de población vulnerable por manzana con la ecuación siguiente (IMTA, 2015):
El nivel de vulnerabilidad de la población de acuerdo con la edad se clasifica en cinco tipos: muy alta, alta, media, baja y muy baja (véase tabla 1), y la clasificación depende del valor obtenido del índice de población vulnerable.
El proceso para la generación del mapa de vulnerabilidad se realizó en un SIG, donde se incorporó la información del AGEB con las manzanas de la ciudad de Cuernavaca (véase figura 1) mediante el identificador geográfico CVEGEO.
La vulnerabilidad de la infraestructura se determinó con base en un estudio de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol, 2013) que permite estimar las viviendas en pobreza. La Sedesol especifica el índice de vivienda vulnerable en el cual se consideran las viviendas con piso de tierra o viviendas sin electricidad. El índice se calcula por manzana de acuerdo con la ecuación siguiente (IMTA, 2015):
La vulnerabilidad de las viviendas por manzana en la ciudad de Cuernavaca se puede observar en la figura 2.
Asimismo, se obtiene el mapa de vulnerabilidad de la ciudad de Cuernavaca, el cual contempla la combinación del mapa de vulnerabilidad de la población y el mapa de vulnerabilidad considerando piso de tierra (véase figura 3).
La determinación del mapa de vulnerabilidad por tipo de vivienda es una adaptación de la propuesta por el Cenapred, de acuerdo con la información contenida en el AGEB. Se puede consultar, por manzana, el número de viviendas particulares habitadas con un solo cuarto, con dos cuartos, con tres cuartos y más, además de la población económicamente activa. Con esta información es posible determinar los tipos de vivienda y, por tanto, el grado de vulnerabilidad de las construcciones (véase tabla 2).
Con base en la clasificación de la tabla anterior, en la figura 4 se muestra el mapa de vulnerabilidad por tipo de vivienda para la ciudad de Cuernavaca.
Conclusiones
La vulnerabilidad de la población de Cuernavaca por manzana de acuerdo con la edad, y con base en los rangos establecidos en la tabla 1, es la siguiente: 4.2% muy alta; 9.4% alta; 28.2% media; 30.5% baja y 14.1% no clasificado. Entonces, se puede concluir que la población del municipio de Cuernavaca no presenta susceptibilidad a la vulnerabilidad, ya que sólo el 13.6% se encuentra en el rango de muy alta-alta.
Con respecto al análisis de vulnerabilidad de la infraestructura por manzana, se tienen los siguientes datos: 0.1% media; 2.0% baja; 83.7% muy baja y 14.1% no clasificado.
En este caso, la infraestructura no es susceptible a la vulnerabilidad: 113,019 viviendas, de un total de 114,637, son de piso diferente a tierra, de acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020.
Para la vulnerabilidad por tipo de vivienda, donde se considera el tipo de construcción, resultaron los siguientes datos: 2.4% tipo I; 10.8% tipo II; 4.1% tipo III; 59.3% tipo IV y 23.4% no clasificado.
Como puede observarse, la vulnerabilidad por tipo de vivienda es muy baja; la ciudad de Cuernavaca cuenta con alto porcentaje de viviendas habitadas con tres cuartos y más (59.3%) y ante la ocurrencia de un fenómeno perturbador se tendría un costo del menaje de 150,000.00 pesos para este tipo de vivienda.
En los resultados obtenidos hay un porcentaje que no entra en el rango de vulnerabilidad; esto se explica porque existe una diferencia en la cantidad de manzanas urbanas que considera el marco geoestadístico y los principales resultados del AGEB y manzana urbana 2020, que cuentan con 4,909 y 4,219 manzanas, respectivamente. Se debe tener en cuenta que el análisis se realiza a partir de los indicadores establecidos en el AGEB.
Los mapas de vulnerabilidad obtenidos, son de gran utilidad cuando se está determinando la susceptibilidad de un bien expuesto a un fenómeno perturbador, como son las inundaciones en zonas urbanas. Con el análisis realizado, es posible identificar los sitios susceptibles y con base en ello, se pueden establecer acciones correctivas que minimicen los daños ante eventos hidrometeorológicos extremos.
Referencias
Centro Nacional para la Prevención de Desastres, Cenapred (2019). Inundaciones.
Cenapred (2021a). Inundaciones. Serie Fascículos.
Cenapred (2021b). Manual de Protección Civil.
Cenapred (2021c). Metodología para la elaboración de mapas de riesgo por inundaciones en zonas urbanas.
Cenapred (2022). Atlas Nacional de Riesgos.
Centre for Research on the Epidemiology of Disasters, CRED (2019). Pérdidas económicas, pobreza y desastres 1998-2017. Bruselas.
Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, IMTA (2015). Estudio de riesgos de inundaciones en zonas urbanas de la República mexicana. Jiutepec.
Secretaría de Desarrollo Social, Sedesol (2013). Lineamientos para la identificación de personas u hogares en situación de pobreza que aplican a los programas sociales de la Secretaría de Desarrollo Social. Subsecretaría de Prospectiva, Planeación y Evaluación. Dirección General de Geoestadística y Padrones de Beneficiarios.